Cajaviva Caja Rural y Fundación Atapuerca han renovado su convenio de colaboración por décimo año consecutivo, en el que ambas entidades apoyan la investigación científica en Burgos. En total, Cajaviva aporta 14.000 euros que van destinados a la tesis del doctorando Aitor Burget-Coca “Activiadades de combustión en la prehistoria”.
En esta línea, Ramón Sobremonte, director general de la entidad bancaria, recalcaba la importancia de este convenio como “motor de desarrollo y sostenibilidad” para nuestra provincia, dada la situación nacional actual en este ámbito. Y es que únicamente el 1,07 del PIB de España está destinado a la investigación y al desarrollo. Así, uno de los directores de la Fundación Atapuerca, Eudald Carbonell expresaba que “la descarga de dinero público y privado hacia la ciencia se ha agravado”.
Por otro lado, en términos más positivos, esta colaboración supone un desarrollo económico para Burgos junto con el auge turístico de los yacimientos de Atapuerca que generan alrededor de 625.000 visitantes al año. Asimismo, el director de Cajaviva expresaba que este apoyo sirve para mejorar la situación de los investigadores puesto que “7 de cada 10 investigadores piensan en abandonar la investigación”.
Tesis doctoral sobre el fuego
La tesis de Aitor Burget-Coca financiada con este convenio, se centra en el estudio del fuego desde la época de los neardentales hasta la Edad del Hierro. El doctorando explicaba que en el yacimiento del Mirador de Atapuerca sí que existen indicios de uso de fuego como método para esterilizar las cuevas que los pastores utilizaban para guardar a las ovejas y a las cabras, y poder reutilizarlas al año siguiente.