Nuestra colaboradora viajera, Silvia Sancidrián, se despide este año con un artículo que resume a la perfección lo mejor que tenemos en nuestra provincia ¿Qué mejor forma de terminar el 2017 que recordando las rutas que hemos hecho por la provincia? Y si aún no has visto todas ¿qué mejor propósito para el año nuevo que descubrir un poquito más de la tierra burgalesa? No hace falta ir muy lejos para disfrutar del paisaje y la cultura. Recuerda: Burgos Origen y Destino.
Hace unos días me percaté de que mi colaboración con este blog puede que no comenzara (por mi parte) con el principio que se merecía. Y no me refiero a la calidad de mis primeros textos (que será algo que siempre quedará a vuestro criterio), sino a su pertinencia. Y es que creo que tendría que haber empezado presentándoos la increíble provincia de Burgos, que lo es y mucho. Así que ahora que acaba el año, permitidme que comience por lo que debería haber sido el principio.
Las sinfines actividades de la provincia de Burgos
La provincia de Burgos tiene una superficie total de más de 14.000 km2 (Condado de Treviño incluido). De norte a sur, 196 km en los que se constituyen diversidad de paisajes no solo culturales, sino también naturales. Asimismo, es cuna del castellano y eje fundamental de la evolución humana. Estamos, por tanto, ante uno de los territorios con más personalidad y belleza de toda la península ibérica. Un sinfín de bellos pueblos, ríos, cascadas, bosques, montes, desfiladeros, cañones, sierras y valles, en los que tanto en invierno como en verano se pueden realizar infinidad de actividades. Desde enoturismo por las Riberas del Duero y del Arlanza, hasta puenting y espeleología en el Monumento Natural de Ojo Guareña o, por qué no, safaris prehistóricos por la Sierra de Atapuerca. ¡Ahí es nada!
El Camino de Santiago
Mención aparte merece el Camino de Santiago, que la atraviesa de este a oeste. Son poco más de 110 km de puro patrimonio, durante los cuales el peregrino sufre, al tiempo que goza, la dureza propia del recorrido. En su peregrinar desde Redecilla del Camino (con su pila bautismal románica —para muchos la más bonita de todo el Camino—) hasta el Puente de Itero (con sus once arcos sobre el río Pisuerga), atrás va dejando localidades como: Belorado, Tosantos, los legendarios Montes de Oca, San Juan de Ortega, Ajés, Rabé de las Calzadas o Castrojeriz. Y por supuesto Atapuerca y la propia ciudad de Burgos, con su majestuosa catedral. Como os decía, son solo poco más de 110 km, pero en ellos se dan cita, si me permitís la expresión, tres Bienes que cuentan con la declaración de Patrimonio de la Humanidad. ¿Se puede pedir más?
Navidad en la provincia
Y una vez hechas las presentaciones, y dado que estamos en diciembre, toca hablar de belenes, de cabalgatas, de luces, de subidas a la montaña. Toca hablar, por tanto (y disculpad que cuele aquí la capital), del Belén Monumental de la Catedral: impresionante, flashback incluido ante la Puerta de Ishtar de un viaje a Berlín de hace ya 10 años. O de los vivientes de Torregalindo o Melgar de Fernamental. Tocaría hablar de Frías, pero este bonito pueblo (la ciudad más pequeña de España), que luce bello todo el año, merece una entrada propia que antes o después tendrá.
Toca abrigarse bien y subir al Mencilla con el club de montañeros, o al pico San Mamés (en la Sierra de la Tesla), desde Tartalés, que es lo que yo haré (si Dios quiere) el último sábado del año junto con mis «celemines».
No recuerdo muy bien cuándo fue la primera vez que lo subimos; ya ha nevado mucho. Lo que sí que sé es que los últimos años más que subir el Belén lo que hemos hecho ha sido aligerarlo de figuras. Porque hubo un momento en que allí se podían contar cienes y cienes de niños jesús, marías y josés, al calor de otros cienes y cienes de mulas y bueyes. ¡Se ve que todo nos parecía poco! Y una vez en la cima, lo que toca es brindar y cantar villancicos, y cuando el día acompaña, sacar el bocadillo y sentarse en una piedra a disfrutar del entorno. ¡Qué vistas, qué tiempos y qué grandes momentos los allí vividos! Seguro que este año también los habrá.
A por un nuevo año mágico
Y para terminar, no puedo sino felicitaros el año que entra. Deseo de corazón que el 2018 os sea realmente próspero, dichoso y, sobre todo, mágico. Porque la Magia, así, con mayúscula inicial, no es exclusiva de la Navidad; ocurre todo el año y además está en nosotros. Eso sí, solo tiene lugar en la medida en que uno se compromete consigo mismo.
Porque «en el momento en que uno se compromete, también interviene la providencia. Ocurren entonces todo tipo de cosas positivas que de otro modo nunca se habrían producido. Una serie de acontecimientos derivan de esa decisión, poniendo a favor de uno incidentes fortuitos, encuentros y apoyo material que ningún hombre podría haber soñado con lograr. Sea cual sea tu sueño, comiénzalo. La audacia tiene genio, poder y magia.»
No lo digo yo (que ya quisiera para mí semejante capacidad de escritura). Es el mismísimo Goethe quien nos exhorta a empezar a vivir. Aprovechemos que llega un nuevo año para comenzarlo con buenos principios.
¡FELIZ NAVIDAD!