La pandemia pasó factura a toda la población y, en especial, a los pequeños negocios. No cabe duda que fue un duro golpe para los empresarios y autónomos, pero con ojos más optimistas, también se han podido sacar oportunidades de ello. Es el caso de Álvaro Boceta, el ganador de la IV edición del concurso de Monólogos de Fundación Caja Rural Burgos, con su monólogo ‘Gaditano en sequía’.
Este gaditano, entrenador personal de profesión, tuvo que reinventarse durante la pandemia al no poder llevar a cabo sus entrenamientos. En ese momento de frustración al quedarse sin trabajo, Boceta pensó que algo tenía que hacer y, en su mente, se vislumbró la posibilidad de dedicarse a lo que siempre había querido pero nunca se había atrevido: ser monologuista. La que era su mujer por aquel entonces fue quien le dio el empujón que necesitaba: “¿te vas a quedar con las ganas?” le dijo. Esa frase fue la que le animó a empezar en este mundo. Y desde entonces, hasta ahora.
Una cualidad innata
Aunque aun no puede dedicarse profesionalmente y hoy en día es un hobby, Álvaro Boceta tiene claro que le gustaría vivir de ello. Y es que tras los tres años que lleva haciendo monólogos, cree que realmente tiene talento para ello. “No puedo ensayar los monólogos que preparo. Cuando los escribo, se que los tengo en la cabeza y en vez de ensayar me los voy leyendo, en mi cabeza voy viviendo el chiste. Al salir al escenario, le doy la vida que yo creo que puede tener. Por suerte o por desgracia me he criado en Cádiz en la calle y he visto a mucha gente de los carnavales y las pausas y el estilo los amanero bien, es una cosa que la tengo intrínseca y no la tengo que ensayar”.
En cuanto a la inspiración para preparar los monólogos, el gaditano explica que no tiene un humor muy marcado, y que en las propias situaciones cotidianas de la vida es donde encuentra las ideas para preparar sus textos. “Puedo ir por la calle y veo una situación, me hace gracia y la apunto para incorporarla a algún monólogo. Celia Cruz decía que la vida es un carnaval y yo digo que la vida es un material. En cualquier cosa que vas viendo o algún chascarrillo que cuenta la gente, lo apunto en mi móvil y luego lo doy forma”.
“Un concurso con mucho nivel”
Respecto a su participación en el concurso de monólogos, Boceta resalta que es un concurso con mucho nivel. Ya es el segundo año que se presenta y sus sensaciones no han podido más que mejorar. “Personalmente no me esperaba ganar, mi idea era ir a disfrutarlo, y fue un gustazo, iba con unas expectativas muy bajas y al final fue de lujo, me sentí como un niño en el escenario y con un buen feeling con el público”.
En cuanto a sus rivales, el monologuista destaca la calidad de todos ellos y, en especial, de la burgalesa Laura. “Cuando dijeron el nombre de Laura en segundo puesto me quedé más tranquilo porque la veía mi rival más directa. Lo hizo genial”.
Hablando sobre sus sensaciones al divertir a la gente con sus chistes, el gaditano destaca que para él es “lo más grande”. “No hay mejor sensación que hacer reír a la gente, sobre todo a una mujer, me encanta”, explica. Igualmente, destaca que en su vida diaria ayuda mucho a la gente. Por una lado, en su labor como entrenador personal tratando a personas con lesiones, donde tampoco puede faltar el humor para suavizar las situaciones más complicadas. Por otro, como monologuista donde consigue que las personas olviden la realidad y se diviertan, aunque sea solo por un ratito.