La Fundación Caja Rural cuenta con una dedicación especial con el sector cooperativista en particular y el asociacionismo de nuestra región en general, manteniendo esta actividad dentro del sector agrario y rural, mediante el uso del asesoramiento técnico, fiscal y, laboral, a cuantos socios y clientes así lo demanden.
Servicio de cooperativas que ofrece la Fundación Caja Rural Burgos
Gracias al equipo de profesionales que poseen, cuya calificación y formación continuada les permite estar al corriente de las modificaciones legales que periódicamente introduce la Administración, pueden procurar a las cooperativas el asesoramiento más eficaz a la hora de gestionar sus obligaciones tributarias y fiscales.
No hay mejor explicación de esta labor que la que nos ofrece Eduardo Páramo socio y empleado de la Cooperativa Agrícola Santa Eulalia, ubicada en Quintanilla Vivar (Burgos) y que debe su nombre a la santa patrona del pueblo “La cooperativa se fundó en el otoño de 1962 con 9 socios”, recuerda sin titubear Eduardo. Actualmente cuenta con 12 familias y 300 hectáreas de terreno ubicadas en el entorno de Quintanilla Vivar, en un radio de más o menos 5 km al centro del pueblo.
Cooperativas agrícolas Santa Eulalia en Quintanilla Vivar
En cuanto a la larga andadura de esta cooperativa, Eduardo y Fernando, otro de los trabajadores de la misma, explican que se celebró una primera reunión a la que asistieron todos los agricultores del pueblo, “para saber si estaban interesados en formar parte de nuestra sociedad. Hubo gente que se apuntó y otros que decidieron quedarse fuera”, dicen. Se tomó como base para crear la cooperativa, la superficie que cultivaba en ese momento cada uno, fuera propia o arrenadada.
“Se partió de lo que se llamaba “el líquido imponible”, sobre lo que se basaba el impuesto sobre las tierras, es decir, en función de la calidad de cada tierra tenías más o menos liquido imponible, por lo tanto pagaba más aquel que poseyera una cantidad de tierra, de mayor calidad, frente a aquel que contaba con mayor superficie de terreno pero de menor calidad”, aclara Eduardo.
“La cooperativa se fundó con un motivo muy claro. Se necesitaba mucha mano de obra ya que para llevar cada superficie se requería a prácticamente todos los miembros de una familia. Al fundarse la agrupación, y debido a la inversión que realizamos en maquinaria, tan solo iba al campo una persona por familia agrícola. Por lo tanto las familias pudieron, a partir de ese momento, reducir su carga de trabajo, y no verse todos implicados en la labor del campo”, comenta Eduardo. Y de esta forma la cooperativa comenzó su trayectoria.
Ayudas a las cooperativas por parte de la Fundación Caja Rural
El sistema de condicionalidad, el cual representó uno de los grandes elementos de las reformas de la PAC de 2003 exige a los agricultores el cumplimiento de una serie de normas si desean evitar el recorte de los pagos procedentes de la Unión Europea.
Y aquí es donde entra en juego el asesoramiento de explotaciones agrarias que la Fundación Caja Rural proporciona a cooperativas agrícolas como Santa Eulalia “Todo lo que supone declaración de parcelas para recibir ayudas y el asesoramiento agrícola al respecto, lo realizan a través de la caja. Por lo tanto la PAC la hacemos con ellos. Nos proporciona información y parte de administración con respecto a las ayudas agrarias. De esta forma sabemos que estamos perfectamente asesorados en todo momento”, comenta Eduardo.
“Al igual que el resto de cooperativas que, como nosotros se dedican a las labores del campo, debemos declarar de qué tenemos sembradas las parcelas. El sistema de la Comunidad Económica Europea establece que no puedes sembrar lo que quieras, por ello, la Caja Rural de Burgos nos asesora en cuanto al porcentaje de cultivo que necesitamos de cada tipo para cumplir la normativa europea.
Es necesario contar con un determinado porcentaje de superficie verde, que puedes cubrir con forraje, girasol, y leguminosas. Otra parte la cubres con cereal u otro cultivo. “Nosotros tenemos trigo, cebada, girasol y forraje”, aclara.
En concreto, desde la Fundación Caja Rural Burgos cuentan con este servicio de asesoramiento que ofrece los siguientes puntos:
- Asesoramiento y planificación de la producción agrícola.
- Asesoramiento sobre las normativa Autonómica, Nacional y Europea acerca de la producción agroalimentaria y medio ambiental.
- Formación e implantación de Sistemas de Calidad, Sistemas de Gestión y Sistemas de Medio Ambiente.
- Gestión y organización de Trazabilidad y Cuadernos de Campo.
- Seguimiento y vigilancia de las modificaciones formativas y de los sistemas de producción durante 3 años.
- Información detallada sobre calidades de los medios de producción, información ambiental de las explotaciones e información de características productoras naturales de los territorios donde las explotaciones agrícolas y ganaderas desarrollan sus actividades.