¿Baby Led Weaning? Parece que es la nueva moda en alimentación infantil, pero nada mas lejos de la realidad. Esta es una técnica para alimentar a los bebés tan antigua como el ser humano, y la que evolutivamente tiene más sentido en el desarrollo de nuestra especie.
¿Acaso tenían batidora nuestros antepasados hace 1000 años? En Fundación Caja Rural te lo contamos, sigue leyendo.
¿En qué consiste el BLW?
En el Baby Led Weaning es el propio bebé quién dirige su alimentación, sin utilizar triturados o purés, directamente con alimentos enteros.
Es una técnica de alimentación complementaria a la lactancia materna/artificial. El bebé decide qué come (dentro de las opciones que le ofrezcamos, y que irán evolucionando conforme el bebé vaya adquiriendo habilidades y autonomía) y cuánto come. Y además, es él quien coge los alimentos y se los lleva a la boca, desarrollando así sus habilidades motoras.
Lo primero es importante porque el bebé va familiarizándose con las texturas y sabores de los alimentos tal cual son, y favorece que en un futuro no sienta desagrado por los mismos.
En la alimentación complementaria tradicional (beikost), en la que todos los alimentos son triturados, el bebé no conoce texturas ni muchas veces sabores ya que se mezclan alimentos y existe una doble transición, leche-puré-alimento, por lo que tenemos que acostumbrar al niño dos veces a los alimentos, mientras que en el BLW esto no ocurre.
También en esta técnica se respeta a que el bebé gestione solo sus señales innatas de hambre y saciedad. Cuando somos los adultos quienes le obligamos a comer una cantidad concreta y además le alimentamos con rapidez, hacemos muchas veces que el bebé coma más de lo que necesita o quiere. Incluso a veces le forzamos a acabarse el plato.
¿Cómo te sentirías si te obligaran a comer algo que no te gusta o sin tener hambre, y apuntándote continuamente con la cuchara a la boca? A ellos tampoco les gusta.
¿Cuándo y cómo empezar con Baby Led weaning?
La OMS recomienda que la introducción complementaria de alimentos no comience antes de los 6 meses. El sistema digestivo de los bebés aún es inmaduro y se puede favorecer la aparición de alergias. La ESPGHAN recomienda que la introducción de alimentos no se demore más allá de los 8 meses.
Por lo tanto, esa es la época adecuada a excepción de bebés prematuros y los que tengan retrasos en el desarrollo. Concretamente se recomienda iniciar con el BLW cuando el bebé cumpla con las siguientes características:
- Se sienta (con apoyo) y es capaz de mantener la cabeza erguida.
- Coordina ojo-mano-boca.
- Ha perdido el reflejo de extrusión, que hace que expulse todo lo que entra en la boca.
- Muestra interés por los alimentos.
Ventajas del BLW
Aún hay más razones y ventajas, así que vamos a enumerar alguna más:
- Mayor aceptación y variedad de alimentos.
- Es bebé estimula más sus sentidos y se fomenta su independencia temprana
- No es necesario comprar productos especiales de alimentación, lo que supone un ahorro económico.
- El bebé come en la mesa con el resto de la familia, no tenemos que hacer comidas especiales
¿Hay alguna consideración especial?
Por supuesto que sí. De hecho, hay varias cosas que debemos tener en cuenta.
- Sobre seguridad. Debemos comenzar siempre que se hayan cumplido las cuatro características comentadas anteriormente: hay que evitar las distracciones y nunca dejarles solos.
- Referente a alimentos, desde el primer día podemos ofrecerle prácticamente cualquier tipo de alimento. Sobretodo hay que tener precaución con el tamaño de alguno de ellos, pero tanto gluten, pescado o huevo pueden incluirse desde los primeros días.
- Acerca de las texturas, ofrecerles alimentos que puedan aplastar fácilmente con el paladar o las encías, ofreciendo ciertos alimentos peligrosos con una textura más adecuada, como la manzana o zanahoria en textura cocida o asada en vez de crudas.
- Del tamaño, durante los primeros meses ofreceremos los alimentos del tamaño de nuestro dedo índice, que el bebé lo pueda agarrar fácilmente. A partir de los 9 meses, ya es capaz de “hacer la pinza” con los dedos por lo que podremos incorporar alimentos más pequeños. Hay alimentos conflictivos por riesgo de atragantamiento como los frutos secos, garbanzos, palomitas, salchichas, pan duro… Estos deberíamos ofrecérselo de un tamaño o textura diferentes.
- En la parte nutricional, hay que saber que los bebés nacen con depósitos de hierro suficientes hasta aproximadamente los 6 meses. Por esta razón es bueno comenzar con la alimentación complementaria a esa edad. Debemos introducir en sus comidas con BLW dos alimentos ricos en hierro al día, teniendo en cuenta la diferente absorción del hierro hemo y del no hemo, en éste último complementaremos con vitamina C.
El atragantamiento: el mayor miedo
Hay que distinguir arcada de atragantamiento. La arcada es un reflejo de náusea que el bebé gestiona con normalidad y del que gana habilidad. Los últimos estudios muestran que a los 6 meses, los atragantamientos ocurren con la misma frecuencia en bebés alimentados con purés y con BLW.
A los 8 meses ocurren más habitualmente en bebés alimentados con purés, probablemente por el menor desarrollo de las habilidades del bebé. En cualquier caso, es conviene saber actuar en caso de atragantamientos, porque el riesgo cero no existe en cualquier opción alimentaria que se escoja.
Estas son solo unas pequeñas indicaciones sobre este tipo de alimentación. Si estás pensando en comenzar con el BLW, desde Centro de nutrición Umami te animamos con ello. Pese a que sigue siendo un gran desconocido incluso en el sector sanitario y por ello se pasa por alto su recomendación, las ventajas que ofrece superan con creces los miedos que se puedan tener.
Por supuesto y como todo, siempre es más fácil si un profesional te guía y te apoya. Busca un Dietista-nutricionista colegiado y actualizado en la materia que pueda hacer de esta experiencia el mejor comienzo en la alimentación de tu bebé.