Hablar de lo positivo que es tener una vivienda sostenible y eficiente está a la orden del día. Conocemos muchas de sus principales ventajas como son el ahorro económico y energético, pero, ¿sabes realmente todas las características y beneficios que estas incluyen?
Pero, antes de empezar ¿qué es una vivienda sostenible? Las viviendas sostenibles son aquellas que, siendo respetuosas con el medio ambiente, aprovechan todos los recursos naturales y de reciclado disponibles para reducir el consumo energético y, por tanto, ayudan a ahorrar en las facturas domésticas.
¿Sabías que en esta clase de viviendas se puede hacer un ahorro del 40% de facturación en agua y entre el 30% y 50% en energía?
Características de las viviendas sostenibles
Emplazamiento y orientación de una vivienda sostenible.
Una vivienda rodeada de zonas verdes reducirá la contaminación atmosférica y ayudará al confort térmico y climático, reduciendo así el consumo de energía. Con una vivienda orientada al sur permitiremos el máximo aprovechamiento de la energía solar tanto para luz como para calor.
La denominada arquitectura bioclimática defiende también tener en cuenta las corrientes de aire y así servirnos de las ráfagas cruzadas para poder ventilar y enfriar la vivienda de una forma natural.
Materiales de construcción de una vivienda sostenible.
La utilización de materiales ecológicos o recicables es un factor fundamental en las casas sostenibles. Maderas como el bambú, los ladrillos cerámicos, el corcho, el vidrio reciclado, la celulosa o incluso algunos morteros ecológicos son los más indicados para conseguir ese compromiso ecológico.
Además, es importantísimo instalar unas buenas ventanas ya que por ahí se pierde mucha energía, pero, con una correcta utilización, como usar ventanas de PVC, conseguiremos un perfecto aislamiento y hasta te pueden ayudar a ahorrar.
Autoconsumo y tecnología en una vivienda sostenible.
Las casas sostenibles siguen el camino del autoconsumo. Aprovechan las fuentes renovables para producir y almacenar la energía necesaria, así como captar agua de lluvia, transformar basura en abono, usar electrodomésticos eficientes y por supuesto, aprovechar los avances de la domótica para reducir los niveles de consumo. Todos estos cambios nos harán ahorrar más de un 50% de energía respecto a las viviendas convencionales.
Tipos de vivienda sostenibles
Podemos diferenciar varios tipos de casas sostenibles.
Viviendas autosuficientes sostenibles: Son aquellas que no dependen de ninguna de las energías renovables para satisfacer el consumo del hogar.
Vivienda modular sostenible: Las casas modulares se construyen con un sistema prefabricado que consiste en la fabricación de un módulo que se une repetidamente hasta conformar la vivienda. Estos pueden ser de diferentes formas y conceptos, lo que permite que se pueda elegir entre multitud de diseños. Un nuevo concepto de viviendas que no requieren de una gran obra en el emplazamiento final.
Vivienda rural sostenible: sumando todas las características de las viviendas sostenibles, estas además incluyen por el autoconsumo y por el propio cultivo de los alimentos, ay que el medio rural donde se sitúan es completamente favorable para ello.
Aunque inicialmente parezca que este tipo de viviendas son más caras, en pocos meses se habrá amortizado la inversión y además estaremos dando un pequeño respiro a la naturaleza.